Justicia e interés
Esa pequeña parte de esta deshilachada comunidad que tiene en sus manos el poder político y económico cree que este es el buen camino y que todo va a favor de sus intereses. Cada medida contribuye a mejorar su posición, a consolidarla, a perpetuar su carácter de elite. Pero están cometiendo un enorme error histórico que les llevará al desastre. El abismo se abre a los pies de cualquier sociedad que favorece el empobrecimiento de la mayor parte de sus miembros y desmantelar el estado del bienestar y cortar los canales mínimos de redistribución de la riqueza entre los miembros menos favorecidos del grupo es el modo más eficaz y rápido para conseguir precisamente eso. ¿Y cuándo lo hayan hecho, cuándo tengan a su alcance la explotación privada de los servicios básicos que antes eran públicos y aseguraban una mínima igualdad, la mano de obra sea barata y el empleo eventual, y seamos todos ya temporeros atentos a la subsistencia, de dónde van a sacar ustedes a los consumidores de lo superfluo que tantos beneficios dejan? ¿y de qué milagrosa manga de mago esperan sacar la paz social que requieren sus negocios y sus ocios si todos tendremos que redondear los ingresos de cualquier modo y recuperar algo de lo que nos han robado? Entonces no bastará el fútbol ni los discursos medidos ni la pose exacta, y vendrán las alambradas, la represión policial, la vigilancia, las cámaras de seguridad..., y ustedes tendrán que escondese detrás de altos muros a hacer sus cuentas, esas que nunca cuadran.