Lo nuestro es ya de otros
Ellos (nuestro gobierno), a falta de un proyecto a medio plazo que todos (ciudadanos del Estado) podamos compartir, ha decidido hacer camino al andar (tarde o temprano ese camino desembocará en una meta) pero, muy mal aconsejado, no consigue más que abrir dudosas trochas que no nos llevan a ningún lugar o al desastre (a nosotros) y justamente a donde otros nos quieren tener (esos que se han propuesto la tarea enojosa de organizar la globalización y que sí tiene un proyecto, uno que nosotros no podemos en ningún caso compartir).