La cabaña
"En una empinada ladera de un ancho valle de montaña en la meridional Selva Negra, a una altura de 1150 metros, se encuentra una pequeña cabaña de esquí. La planta mide seis por siete metros. El tejado inclinado cubre tres habitaciones: la cocina, que también es cuarto de estar, un dormitorio y un estudio. Éste es mi mundo de trabajo..." (A. Sharr, Heidegger's hut, 2006, p. 16).
Así describe Heidegger la cabaña cuya construcción encargó en el verano de 1922 y que todavía sigue en pie. Se trata de una obra de madera en torno a dos muros de mampostería, levantada en un bancal de la pendiente. Tiene a su espalda el bosque de coníferas y al frente un valle amplio que cierran en la lejanía las primeras estribaciones de los Alpes. Es un edificio modesto, elemental, pequeño, funcional ámbito para habitar y pensar. Heideger se refería a él como "arriba", el silencio. "Abajo" era el mundo social, académico, de obligaciones. La libertad, la esclavitud.
LLegado es el momento de subir a construir, tener cabaña, ser en ella..., en libertad, escribir o callar.
Así describe Heidegger la cabaña cuya construcción encargó en el verano de 1922 y que todavía sigue en pie. Se trata de una obra de madera en torno a dos muros de mampostería, levantada en un bancal de la pendiente. Tiene a su espalda el bosque de coníferas y al frente un valle amplio que cierran en la lejanía las primeras estribaciones de los Alpes. Es un edificio modesto, elemental, pequeño, funcional ámbito para habitar y pensar. Heideger se refería a él como "arriba", el silencio. "Abajo" era el mundo social, académico, de obligaciones. La libertad, la esclavitud.
LLegado es el momento de subir a construir, tener cabaña, ser en ella..., en libertad, escribir o callar.